Por Dossier San Juan
Malos resultados, cambio de DT, amenaza a los jugadores, el clima que se vive en Puyuta no es bueno hace tiempo, Fuentes no logra encontrarle la vuelta al equipo y la situación se torna preocupante. El víbora, ¿podrá remontar?
Ocho fechas sin ganar, cambio de Director Técnico, pintadas por parte de la barrabrava. El clima no es el mejor en Sportivo Desamparados, ni futbolística, ni dirigencialmente. Hace aproximadamente un mes la Comisión Directiva decidió resolver la salida del por entonces DT Cristian Bove, a Puyuta llegó el experimentado Técnico Marcelo Fuentes, con vasta trayectoria en el ascenso argentino, pero la solución aún no llegó.
A principio de cada temporada la ilusión siempre desembarca en el Barrio Patricias, pero esta última fue especial, distinta, porque se formó un gran plantel, jugadores que mezclaron experiencia con juventud, con hambre de gloria. Fue por eso que tanto los hinchas como los dirigentes se ilusionaron, más aún cuando llegaron dos viejas glorias, Lucas Ceballos y Matías Garrido. A los dos ídolos se le sumó por ejemplo el que había sido el goleador del último Torneo Federal “A”, Julio Cesar Cáceres.
Las cosas empezaron bien en Desamparados, tal es así que llegó a estar a sólo tres puntos de la cima de la zona 1, pero de pronto todo se derrumbó. Hoy el equipo se encuentra a 15 unidades del puntero, hace 8 fechas que no gana y el juego no da muchos indicios de parecer mejorar. La dirigencia intentó dar un golpe de timón contratando al “Chelo” Fuentes, pero el nuevo cuerpo técnico aún no logra dar en la tecla y los resultados siguen sin aparecer.
La última vez que Desamparados logró sumar de a tres fue el 11 de julio, frente a Villa Mitre de Bahía Blanca. El cantar era otro, el equipo no brillaba demasiado, pero era solido, contundente y golpeaba en los momentos justos. Luego de eso llegaron las 8 fechas sin triunfos, el declive que incluyó las dos derrotas por 4 a 0 ante Bolívar en Buenos Aires y Juventud Unida en San Juan. Para mal de males, aparecieron pintadas en las instalaciones del Club “Jugadores pongan huevo, huevo o plomo, los colores se respetan” fue la frase que rezó en una de las paredes del “Serpentario.”
Allegados al club reconocen que la mejoría no llega y el problema ya no pasa por la dirección técnica, sino por los jugadores, y claro está es imposible cambiar un plantel completo, siempre es más fácil culpar al DT que a los protagonistas que influyen dentro del campo de juego. Cómo si fuera poco, Bove había encendido la mecha en su despedida a través de las redes sociales “Me voy tranquilo y contento por la oportunidad y porque el equipo queda sexto en zona de clasificación y con números muy buenos que avalan el trabajo realizado. La vara queda alta, un 55,5% de efectividad y lo más importante sigue siendo que se cumpla el objetivo que todos nos planteamos hace casi un año atrás.” Expresó el ex DT puyutano.
Al Torneo le quedan 10 fechas, el equipo se encuentra en la octava posición, en el último lugar de zona de clasificación, ¿Serán suficientes las fechas restantes para mostrar una mejoría en el juego, o Desamparados tendrá que resignar otro torneo más?
