Por Dossier San Juan.
Alberto Zapata Bacur se recupera tras el vuelco en el que perdió un brazo. Hasta conoció a la médica que lo asistió y fue clave para que siga con vida. Sus historias.
El pasado domingo 15 de noviembre el conocido motociclista Alberto Zapata Bacur sufrió un accidente de tránsito en Ruta 40 y Calle 5, Pocito. En el siniestro, lamentablemente sufrió la amputación de uno de sus brazos y diversos politraumatismos por los cuales estuvo internado en Terapia Intensiva.
Milagrosamente, gracias a la gran asistencia del personal médico, el joven sanjuanino logró recuperarse y recibió el alta a tan sólo una semana del hecho. Para esto, fue crucial la asistencia que recibió en el momento del vuelco cuando una médica, identificada como Sofía Moreno, lo asistió.

La mujer, de 32 años, vio el accidente cuando pasaba por el lugar con su familia y decidió frenarse a brindar ayuda. En medio de la gente, la médica logró llegar hasta donde estaba Zapata. Comenzó a hablarle para que se mantuviera despierto y a estabilizarlo intentando que no perdiera más sangre.
La joven médica es especialista en emergencias algo que fue vital para que pudieron controlar la hemorragia del brazo amputado. Pese a haber sufrido esta grave lesión, el Wey ya se encuentra en buenas condiciones de salud debido a la gran asistencia qué le dio Moreno en dicho momento.
Según contó Alberto, el accidente ocurrió cuando ‘pestañeó’ por cansancio y se le fue el auto contra la banquina. Al momento de querer estabilizarlo terminó volcando. Afortunadamente, a los pocos segundos por el carril del sentido contrario viajaba Morena quien no dudó en frenar.

Con el consentimiento de su familia, ella acudió a ayudar al chico. También, Alberto ‘Wey’ Zapata recordó que hubo otra doctora más en el lugar del siniestro, quien colaboró yendo a la Policía a dar aviso del accidente para que recibiera el auxilio oportuno lo más pronto posible.
En cuanto a la pérdida de su brazo izquierdo, el endurista aseguró que en todo momento sentía que aún lo tenía. Incluso todavía tiene esa sensación ya que le dan pinchazos y calambres en la zona de la amputación. De todas formas, él agradece que aquella tarde noche no terminara en tragedia.
Ese día, el Wey fue trasladado al hospital Rawson donde estuvo internado en terapia intensiva durante 2 días. Milagrosamente, pese a sufrir la pérdida de un brazo y haber padecido una afección en sus pulmones, recibió el alta a los 7 días y pudo retornar a su casa.

El joven ahora deberá estar en reposo para luego pensar en una rehabilitación y una futura colocación de una prótesis. En este sentido, detalló que hace dos años ya entrena en moto con un solo brazo con lo cual imagina que podrá volver a subirse y practicar lo que más le gusta.
El joven de tan sólo 23 años, quien demuestra un optimismo ejemplar, agradeció todos los mensajes de aliento que recibió. También mostró su gratitud a quienes se acercaron a brindarle su apoyo al centro de salud como así también a quienes se ofrecieron a donar sangre para su recuperación.
