DOSSIER SAN JUAN

Grávida San Juan evalúa cómo seguir trabajando luego de la legalización del aborto

Compartí con tus amigos

Por Bernardo Sánchez Bataller

María Elena Amatta, encargada de prensa, dialogó con Dossier San Juan para hacer un balance del 2020 y proyectar los desafíos que trae la reciente sanción de esta ley.

Grávida es un servicio que nace en el seno de la iglesia católica, inspirado en el encuentro entre la Virgen María y su prima Isabel. Por su tipología, no es categorizado como ONG y se financia gracias al esfuerzo de sus colaboradores. A nivel nacional, existe desde hace más de 30 años y en San Juan comenzó en 2012.

En diálogo con Dossier San Juan, María Elena Amatta (encargada de prensa) comentó que Grávida busca acompañar a la maternidad y paternidad en crisis, en medio de todo lo que ocurre en la sociedad actual. La misión es cuidar y proteger a la mamá y la vida del niño por nacer. Para ello, tienen como objetivo principal evitar que se tome la decisión de realizar un aborto. De todas maneras, el equipo de Grávida entiende que esa es una definición que les corresponde a los padres del niño que se encuentra en el vientre materno. Por esta razón, acompañan en el proceso, brindando información objetiva y científica. Para este cuerpo de voluntarios es fundamental analizar cómo se puede colaborar con la mujer para abrir las puertas en cuestiones económicas, laborales y familiares. Por otro lado, María Elena aclaró que también existe la posibilidad de que los padres decidan dar en adopción a su hijo.

La encargada de prensa de Grávida resaltó la experiencia que les ha brindado estos 8 años de trabajo en la provincia. Estar cerca de las mujeres embarazadas les permite saber cómo se desarrolla el antes y el después. Es un proceso de 9 meses en el que la madre se va preparando y adaptando. La mujer pasa por momentos de confusión y negación con el embarazo y es por eso que este servicio de la iglesia busca brindar acompañamiento.

Además, María Elena Amatta destacó el papel que cumple el Proyecto Raquel, dentro del Área de Sanación de Grávida. Consiste en una iniciativa que trabaja junto a mujeres que han practicado un aborto y sufren secuelas posteriores a la decisión tomada.

Al analizar lo que fue este 2020, la encargada de prensa comentó que al comienzo fue difícil. Tuvieron que replantear la metodología de acción y a nivel nacional se brindaron capacitaciones a través de encuentros virtuales. Con el paso del tiempo, María Elena comentó que se animaron a la virtualidad. Los talleres de gestación y crianza se dieron a través de WhatsApp y continuaron promoviendo sus actividades y entrevistas con profesionales para las embarazadas. El Área de Difusión tuvo un año de mucha actividad en redes sociales. También continuaron con el acompañamiento a las mujeres embarazadas, en ocasiones de manera presencial, cumpliendo los protocolos correspondientes. Además, pudieron seguir adelante con las campañas de recolección de ropa, pañales y leche que se realizan todos los años. En 2020 se pudo hacer sin problemas y llegaron incluso hasta los departamentos alejados. De esta manera, Grávida estuvo presente en las necesidades económicas de las mamás y sus bebés.

La campaña «Navidad en pañales» seguirá vigente durante el mes de enero

Por último, María Elena Amatta anticipó que esto no se termina con la sanción de la ley. Grávida siempre estará acompañando a la mamá y la vida por nacer. Independientemente de la legalización del aborto en Argentina, las voluntarias saben que hay mucho por hacer. Con respecto a la proyección hacia 2021, están esperando la convocatoria de Grávida a nivel nacional. Por el momento, el equipo que trabaja en San Juan se encuentra en shock y con una gran decepción por la decisión tomada en la Cámara de Diputados y Senadores de la Nación.

Desde este servicio de la iglesia católica no saben cómo será el próximo año, por la campaña de la vacunación y el posible rebrote. Lo que sí tienen claro es que continuarán trabajando desde el marco de la legalidad.