Por Charbel León Sefair
En el marco del “Día Mundial del Teatro” “Richy” Cairoli dialoga con Dossier San Juan, sus comienzos, sus objetivos y la clave para ser un gran actor.
El teatro encierra una verdadera magia y es que, el sólo hecho de poder estar tan cerca de los actores y ver sus expresiones en vivo, deja al espectador sin palabras. El teatro, a diferencia de otras artes escénicas, tiene la particularidad de despertar verdaderas pasiones, sentimientos y emociones una vez que comienza la obra. Es por eso que semejante movimiento cultural tiene su “Día Mundial”.
El Día Mundial del Teatro fue creado por iniciativas del Instituto Internacional del Teatro (ITI) en 1961, se celebra y conmemora anualmente el 27 de marzo, la elección de la fecha se debió a que, desde 1954, el 27 de marzo iniciaba la temporada en el Teatro de las Naciones de París, evento con en el que, además, se pretendía lograr una comunión entre países después de finalizada la Segunda Guerra Mundial, en días de la reconstrucción europea.
En el marco del “Día Mundial del Teatro”, Dossier San Juan dialogó con el actor sanjuanino Ricardo Cairoli, quién hace algunos años se desempeña en el mundo de las tablas y actualmente comenzó a incursionar en la TV sanjuanina, “Actualmente estoy conduciendo un programa de televisión y estoy cursando de forma online la carrera de Formación de Actor en la Escuela Metropolitana de Artes Dramática de Buenos Aires” expresa “Richy” como carta de presentación.
A un niño siempre se le pregunta que quiere ser cuando sea grande, en su caso, “Richy” siempre supo que la actuación era lo suyo, luego ya de grande lo confirmó “Desde chico siempre me gustó la actuación, pero nunca había practicado, por así decirlo. A los 18 años empecé a hacer actuación, a los 24 años me di cuenta que me quería dedicar plenamente a eso.”

Nadie le inculcó el deseo de actuar, como todo artista, nació con esa cualidad innata, que con el correr de los años fue creciendo y así lo explica “Mi deseo por la actuación se fue incrementando a medida que fueron pasando los años, al principio cuando empecé, me gustaba hacerlo como hobby, un hobby muy pasional, no podía faltar a ninguna clase, me gustaba hacer cursos de improvisación, de comicidad, y poco a poco fueron aumentando esas ganas. En el año 2017 no hice nada y me sentí vacío, al año siguiente en enero, me di cuenta de que lo que me gustaba, era actuar y era a lo que me quería dedicar plenamente.”
Además del talento físico, para imitar, para meterse dentro del personaje, también es muy importante la teoría, y así lo entiende “Richy” “Lo más importante para una buena interpretación, son las ganas. Si vos tenes ganas de hacer algo, siempre te va a salir bien, vas a tener ganas para estudiar un poco más, si vas a imitar a alguien, vas a estudiar a esa persona, básicamente siempre desde las ganas. Nada es imposible, hay que mandarse, equivocarse y volver a hacerlo.”
Así como los deportistas fijan sus referentes en su labor, también lo hacen los actores, y Cairoli no es la excepción “Siempre me gustó mucho la comicidad, uno de mis actores referentes es Jim Carrey, la forma que tiene de hacer comicidad es increíble y también facetas de poder hacer dramas a partir de una persona tan conocida en el mundo de la comicidad. A nivel local me gusta mucho Guillermo Francella, que logró hacer dramas luego de haber tenido un personaje como fue el de “Casados con Hijos”, donde era el icono más cómico de Argentina, ellos dos son mis referentes.”
Con el crecimiento profesional entre ceja y ceja, “Richy” piensa en grande y se enfoca más que nunca en su carrera actoral “Me gustaría poder participar de alguna película, estar en teatros, me gusta hacer televisión. A futuro me gustaría seguir formándome y actuar en diferentes rubros, en cine o en teatro o en televisión, los tres rubros me encantan y apunto a poder lograrlo.”
